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Hawkesworth para Miu Miu combina retratos íntimos de la modelo emergente Estella Boersma con jocosas coreografías en una yuxtaposición artística de forma y silueta.

La campaña explora el efecto de las oposiciones sutiles y directas evidentes en cada aspecto de las imágenes, es como si la dualidad fuera el guión metafórico sobre el que se basan.

Sutil pero provocativa, la belleza de Boersma reside en su dualidad: es inocente y sofisticada, sensual y segura, desdibujando las feminidades con una confianza equilibrada.

Vemos bolsos y carteras de dos tonos en lujosas pieles que se convierten en esculturas femeninas congeladas en el tiempo y el espacio. Estas expresiones mágico-realistas son en sí mismas un estudio del arte de la yuxtaposición; cada escena de bodegón combina objetos cotidianos y lujo extremo con un sentido de posibilidad y asombro.

Pasado, presente y futuro se convierten en realidades paralelas: estampados florales de tapicería vintage se aplican a jerséis sin mangas y cárdigans, y modernos trajes cortos masculinos inspirados en los uniformes de los boy scouts. Las líneas de género se cruzan cuando el clásico blazer de Miu Miu en gris, azul o negro ofrece un discreto intercambio de códigos femeninos y masculinos. Una chaqueta impermeable en ciré estampado de cocodrilo se combina con pantalones cortos y calcetines de seda y lana hasta la rodilla que oscilan entre lo sexy y lo estricto, lo femenino y lo juguetón.

Las imágenes de Hawkesworth transponen el continuo romance de Miu Miu con el poder de los opuestos, y amplifican la artesanía y la auténtica búsqueda de sentido y conexión emocional en el corazón de esta colección.